jueves, 8 de julio de 2010

Abajo las cremalleras!

Hay un sádico placer en la autocompasión. Y eso caca. Hay un sádico y adictivo placer en creer que el disfraz es la piel. En creer que en Carnaval somos monotonía, apatía, anhedonia, tristeza, indefensión aprendida, depresión... y quién sabe cuántas cosas más, aunque solo sean un disfraz.

Desabróchate. Quítatelo todo. Si no llegas porque la cremallera está en la espalda, pide ayuda. Y ahora, mírate desnudo, sin nada. Ese sí que eres tú.


(Imagen de William Merritt Chase)

1 comentario:

  1. Precioso y acertado como siempre, pequeña. Cuenta conmigo para bajarte la cremallera, si es que lo necesitas. Y metafóricamente hablando, también. ¿Por qué no?

    Te quiero.

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